Curiosos recovecos de Buenos Aires, generados por vías, puentes y demás componentes del entramado porteño.
Una placita post-elevación del tren.
La Avenida Juan B. Justo con su Metrobús central y las vías del Ferrocarril San Martín (entre las estaciones Chacarita y Palermo) se encuentran a la altura de la Avenida Córdoba. El tendido ferroviario está elevado a partir de la megaobra inaugurada hace unos cinco años. Este cruce origina el vértice de un triángulo en cuyo interior se creó un pequeño espacio verde, al que se le dio el nombre de Lolita Torres. Se trata de una plazoleta que, como se observa en la foto, está bordeada de anchos caminos provistos de baldosas, con algo de vegetación en el medio. Más atrás, también se puede distinguir un cartel redondo, de color azul, que indica que bajo la superficie, corre, entubado, el Arroyo Maldonado.
A la izquierda de la imagen está la calle Jufré, a la derecha, la Avenida Córdoba y al fondo, paralela al trazado elevado del Ferrocarril San Martín, otra arteria, Darwin. Este rincón urbano surgió a partir de la citada megaobra. Anteriormente, siendo la Avenida Juan B. Justo la que estaba elevada en forma de puente, y con el tren trasladándose a nivel del suelo, la fisonomía del lugar era bastante diferente: el “rincón” estaba, pero no era la plazoleta sino un mini-terreno vacío y olvidado por el paso del tiempo.
El pequeño tramo de Jufré tiene características especiales, considerando lo “desconectado” que está del resto del trazado. Esta parte de Jufré que aparece en la imagen, se corta en Juan B. Justo y recién reanuda su trazado luego de esta avenida, pero no inmediatamente después del cruce, sino unos 50 metros hacia el lado de Castillo, su paralela.
