La intersección de las avenidas Corrientes y Dorrego es un punto de enorme circulación. Allí coinciden a diario, gran cantidad de peatones y vehículos de diversa clase. Además, cabe sumar el paso del subterréano (Línea B) y el los trenes por las vías del Ferrocarril San Martín, distantes a pocos metros de la citada esquina. Hasta hace unos años el tendido ferroviario estaba al nivel de suelo y por ende, tenía barreras. Luego se realizó la elevación de las vías, megaobra que abarcó una importante sección de la Ciudad de Buenos Aires y que trajo alivio a mucha gente que transita cotidianamente el territorio porteño.
Sin embargo, cuando se inauguró la obra, la reapertura de las estaciones La Paternal y Villa Crespo –que había cerrado en 2018- sufrió una demora que no estaba prevista en el programa, en parte por un conflicto con la empresa adjudicataria –la cual interrumpió desembolsos de dinero que demandaba la obra-, y en parte, por la pandemia. Así las cosas, agosto de 2019 era la fecha establecida para la rehabilitación. Pero no pudo ser. La solución llegó de a poco: en octubre de 2021, la obra fue cedida de Ciudad a Nación; los trenes volvieron a detenerse en La Paternal en julio de 2022. Y finalmente también la estación Villa Crespo volvió a entrar en servicio. El martes 26 de septiembre a las 20 horas, una formación del San Martín se detuvo en el lugar, decretando el esperado funcionamiento de la estación que hasta 2016 se denominaba Chacarita (se encuentra en el límite de ambos barrios, siendo las vías las que establecen dicho límite).
El sitio web zonales.com, detalló:
Hasta hace pocos meses, las quejas por las demoras en las obras de la estación Villa Crespo se multiplicaban entre los usuarios y en las redes sociales. Parecían paralizadas. Pero en los últimos sesenta días todo se aceleró para que la estación pueda ser reabierta al público. Los trabajos en ejecución comprenden la terminación de los accesos y vestíbulos, escaleras, losas, andenes, refugios, la provisión de cartelería y mobiliario, instalaciones sanitarias, eléctricas, de audio y de videovigilancia, así como la finalización de boleterías y edificios operativos, entre otras instalaciones. Además, reemplazaron todos los equipamientos que resultaron dañados durante los más de dos años en los que la obra quedó abandonada en épocas de pandemia. Entre esos equipos se cuentan los motores de las escaleras mecánicas y ascensores”.
Foto: una vista aérea de la estación Villa Crespo (crédito: Trenes Argentinos).
