CUANDO ESTÉS DESPECHADO…

martinez_cespedes

Cuando estés despechado, cuando todo se te vuelva en contra, cuando las amistades sean cosas banales, cuando te estrelles contra una pared, cuando te caigas al piso para no poder levantar la cabeza, recuerda que Dios protege al desvalido, que existe piedad para el débil y que la angustia que oprime tu pecho algún día se transformará en alegría a borbotones.

Dios piadoso, invoco tu protección, para mí y para todos los que amo, para mi esposo querido, para mi hermana del alma, para mi hijo adorado, para que siempre estemos juntos, unidos por el lazo eterno del amor.

En este día de calor intenso deseo sentir la brisa rozando mi rostro y el olor del pasto húmedo por el rocío de la mañana, ver los gorriones volando bajo, a ras del piso, la rosa china erguirse hermosa sobre la planta. Y quiero contemplar y sonreír al mirar la risa de un niño.

Llega un nuevo año, transcurrieron muchos acontecimientos buenos, plenos de satisfacción y bonanza, como asimismo de duda e incertidumbre. Y hoy, que estoy mayor que ayer y más joven que mañana, siento nostalgia por lo vivido y esperanza por un futuro mejor.

Qué linda eres, María Laura… Una flor de azahar pareces, con tu cutis perlado, tus grandes ojos pardos y tu sonrisa que se arremolina sobre tu boca cual una granada. Seguramente te dirán muchas lisonjas al recorrer con gallarda esbeltez las calles de la ciudad y sentirás en tu interior que deseas ser libre para volar al viento como los barriletes y que Dios proteja tus retoños por los que darías la vida.

Dulce juventud, jalonada de algarabía, fiestas coloridas matizadas con viajes recorriendo tus verdes paisajes, país. Campamentos estudiantiles bajo la luz de la luna, al tímido compás de una guitarra interpretando viejas canciones de amor y esperanza. Coplas y vidalas, versos y payadas, para culminar con la hermosa canción de la amistad junto al fogón.

Raquel Seltzer

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