Apenas cuatro clubes hay en La Boca: el más conocido Boca Júniors, Bohemios, Catalinas Sur y el Darling, ubicado en Brasil 50 (entre Azopardo e Ingeniero Huergo), que acaba de arribar nada menos que a los 99 años. Se trata de una entidad dedicada a un sólo deporte: aunque cuenta además con pileta, buffet, quincho y gimnasio, el tenis es su actividad original y con el objetivo de practicarlo, se produjo su fundación, el 11 de abril de 1918.
Juan Castagnola fue el primer presidente. Encabezaba oficialmente a un grupo de amantes de una actividad escasamente difundida en aquellos tiempos. Esto no impidió que merced a su ímpetu, lograran el apoyo de la empresa Las Catalinas, que cedió en forma precaria una fracción de sus terrenos, hoy pertenecientes al Hospital Argerich. En esas tierras inhóspitas y con dinero de su propio bolsillo, erigieron el club y construyeron las primeras canchas, en lo que hoy es valorado como una verdadera hazaña por parte de los que tomaron la posta de los fundadores.
El predio que donde actualmente se encuentra el Darling, es vecino al Hospital y cuenta con casi mil metros cuadrados. Allí se distribuyen las 13 canchas -todas de polvo de ladrillo- y hacia el tenis está orientada la mayoría de la actividad: funciona una escuela, un centro de entrenamiento, se juega un torneo interno y el Darling compite en Interclubes.
La estructura arquitectónica de sus instalaciones, es otro orgullo de los asociados que mantienen viva la pasión por el tenis y el espíritu de pertenencia de los soñadores que casi un siglo atrás colocaron la piedra fundacional del club.
Fotos: agradecimiento darlingtennisclub.org
