CON EL CORAZÓN EN NÚÑEZ
“La foto está tomada al pie del Vesubio en Italia. Pero la camiseta no es la del Milan…», cuenta risueñamente Raúl, un confeso hincha de Defensores de Belgrano que integra el Centro para la investigación y la Historia del Fútbol. “Soy hincha de Defensores y de River, pero de River abunda la información, así que entendí que hacía más falta buscar los datos de Defensores”, aclara, antes de hacer hincapié en los detalles referidos a su pasión por los números futboleros.
-Dentro de lo relacionado a la historia del fútbol, ¿cuál es tu máximo placer?
-Lo que más me agrada es la búsqueda de datos. Ahora las cosas han cambiado, pero durante muchos años, en épocas pre internet, eso significó largas jornadas en hemerotecas. Encontrar un dato difícil tras larga búsqueda siempre es un placer.
-¿Cómo y cuándo se te ocurrió arrancar con esto?
-Desde mi juventud, cuando empecé a ir a la Biblioteca Nacional como estudiante de Derecho, siempre me hice un rato para pasar por la hemeroteca y leer diarios de antaño en búsqueda de datos de fútbol. Pero no era nada sistemático. Sin embargo, aún antes, creo que desde que coleccionaba figuritas en la primaria, anotaba planteles y recordaba formaciones de memoria. Esa primera capa de conocimientos aún perdura y puedo recitar formaciones de los ’60 con mucha mayor facilidad que las actuales. Viví 20 años en Salta y cuando volví, ya pasados los 40 años, a la par que me ocupé de terminar mis estudios universitarios que había abandonado tantos años, empecé a colectar y guardar en las hemerotecas datos concretos: me ocupé de la historia de Defensores de Belgrano y, secundariamente, de la de River.
-¿Cuánto tiempo por día o semana solés dedicarle a las estadísticas y demás actividades vinculadas a la historia?
-Eso es relativo, ya que depende de las épocas. He tenido trabajos muy demandantes que a veces me han dejado poco tiempo para esto. Pero a esta altura tengo recolectados prácticamente todos los partidos de Defensores que se pueden conseguir (hay un par de años en la década de los ’50 que son un agujero negro). Son más de un siglo de fútbol, sin perjuicio de que no es lo único que me interesa en materia de investigación histórica: he publicado en boletines del CIHF y en diarios del interior sobre una variedad de temas.
-¿Qué es lo más loco que hiciste para tratar de encontrar material?
-Creo que la búsqueda en archivos de diarios pequeños, de pueblo. Hay un viejo diario de Avellaneda cuya colección está en poder de El Sol de Quilmes. Allí, en una especie de catacumba olvidada, obtuve la síntesis de un partido de los años ’20, que ni Lodise y Kurhy en su exhaustivo trabajo habían obtenido.
-Más allá de hacerlo como hobby, ¿se te ocurrió publicar algo de lo que hacés?
-Como dije antes, pequeños trabajos o notas las he publicado en diversos medios. Pero publicar 100 años de partidos de un club de ascenso no parece rentable para ponerlo en papel. Sin embargo, estoy trabajando en la preparación de una página web donde estará todo. Son más de 20 años de laburo.
-¿A qué te dedicás al margen de este pasatiempo?
-Mi trabajo de los últimos 22 años ha sido la abogacía. He trabajado en el Estado y hace un par de años me retiré de un puesto gerencial. Además de mi próxima jubilación, trabajo en diversos proyectos porque no me voy a retirar. Pero la pandemia ha puesto a todo entre paréntesis.
