Cuando no seas perfecto (nadie lo es), cuando te sientas mal por un error, cuando el mundo gira alrededor del sol mientras la luna se asoma, cuando te sientas ofendido injustamente… piensa en tus seres queridos, que siempre te apoyarán con su amor.
Me enteré, con dolor, del fallecimiento de la estrella italiana del cine Gina Lollobrigida. En el principio de su carrera artística había participado en películas del neorrealismo italiano, como “Pan, Amor y Fantasía”, del gran director Vittorio de Sica. Posteriormente, actuó en el cine norteamericano, por ejemplo, en el film Salomón y la Reina de Saba, junto a Yul Brinner y Tyrone Power, actor que falleció con sólo 44 años, durante el rodaje. Se da la circunstancia que soy admiradora de su hija, la cantante Romina Power, cuya belleza y simpatía atraviesa la pantalla televisiva, y disfruto enormemente las ocasiones en que puedo verla cantar.
A propósito de lo dicho líneas arriba, precisamente, quiero referirme a Salomón, hijo del Rey David, considerado en la Biblia como el hombre más sabio que ha existido. Su manera de resolver el litigio entre dos madres que reclamaban al mismo niño, es el origen de lo que hoy conocemos como decisión salomónica: la que busca satisfacer a todas las partes de una contienda judicial.
Mi amiga María Inés vino a visitarme después de un prolongado tiempo. Ella estuvo convaleciente de una operación, período en el cual la congoja y la tristeza me invadieron, pero al verla nuevamente, sana y recuperada, sentí una gran alegría y volví a sonreír.
El Libro de la Vida tiene páginas blancas, que el tiempo va completando día tras día, está bendecido por Dios y debemos regarlo con nuestras buenas acciones desde que nos levantamos por la mañana, hasta que nos acostamos por la noche, sin olvidarnos de elevar nuestras oraciones al Ser Supremo.
Cuando son difíciles las palabras para explicar que sentimos en la mente y en el corazón, quizás sea mejor el silencio para expresar muchas cosas, y a pesar de todo, como dice una canción, si encuentras el modo de sentirte vivo, de tener fe, de confiar en ti y en tus seres amados, podrás encontrar la felicidad.
Raquel Seltzer
