
La imagen que ilustra esta nota sirve para comprender lo que sucedió en una fábrica del sur de la Ciudad de Buenos Aires. La foto forma parte de un comunicado de la Policía de CABA, referida a la clausura de un sitio donde se decomisaron más de 600 bidones que contenían productos vencidos. La planta fabril está en Nueva Pompeya –Romero al 800- y se especializa en productos cosméticos, indicó el comunicado. Además de la infracción relacionada a la acumulación de productos vencidos, en el lugar se vertían ilegalmente en la red cloacal, residuos químicos. El informe señaló que “la Seguridad Personal de la Policía de la Ciudad detectó el funcionamiento en forma clandestina de una fábrica de productos químicos dedicados a la cosmética para uso personal y corporal que funcionaba a puertas cerradas, sin habilitación ni señalización comercial, y arrojaba residuos peligrosos directamente a la red cloacal”.
La fuerza porteña brindó un detalle pormenorizado de las irregularidades halladas en la propiedad de la calle Romero, en la cual “se secuestraron 634 bidones de entre 1 y 25 kilogramos con líquidos como aceites, ácidos y esencias, además de frascos y botellas, en su mayoría con fechas de vencimiento anteriores a 2018. Los productos quedaron en carácter de depositario judicial dentro del mismo establecimiento, mientras que el responsable fue notificado por la contravención”.
Esto y más
El acopio de productos vencidos y el hecho de que arrojaran residuos en forma ilegal, no fue lo único. A esto hay que sumarle que las autoridades encontraron “cuatro matafuegos vencidos, cables expuestos, falta de plan de autoprotección, inexistencia de certificado de aptitud ambiental y de carpeta técnica”. Debido a esta situación, se inhabilitó preventivamente el lugar.
La fábrica en cuestión está ubicada a unos 250 metros de la Avenida Sáenz, en el tramo en que se produce el ascenso-descenso al Puente Alsina, el cual cruza por sobre el Riachuelo.
“El Laboratorio de Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina tomó muestras de los afluentes para su análisis pericial, mientras que la Brigada de Emergencias Especiales de Bomberos evaluó los productos hallados y determinó la necesidad de continuar con la inspección, elemento por elemento, bajo protocolos de bioseguridad”, indicó el comunicado, añadiendo los siguientes datos de índole técnica: “El procedimiento fue ordenado por la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), a cargo del Dr. Matías Michienzi y con intervención del secretario Dr. Ricardo Bomparola, en el marco de una causa por infracción al artículo 57 del Código Contravencional que sanciona ‘Colocar o arrojar sustancias insalubres o cosas dañinas en lugares públicos’ ”.
Entretanto, la Policía de CABA puntualizó que dicha inspección la llevaron a cabo estas áreas: División Delitos contra la Salud y la Seguridad Personal de la Policía de la Ciudad, junto a la Dirección General de Fiscalización y Control (DGFyC), la Dirección General de Control Ambiental (DGCONTA), el Laboratorio de Delitos Ambientales de la Policía Federal, Bomberos de la Ciudad y el Cuerpo de Investigaciones Judiciales.