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DE VILLA DEL PARQUE A CÓRDOBA CAPITAL

Ricardo Mase nació el 15 de febrero de 1955 en la Capital Federal. En su vida “porteña”, Villa del Parque fue el barrio que lo cobijó. Sin embargo, hace 35 años se mudó a Córdoba Capital. “Por trabajo de mi padre se trasladó toda la familia y nos quedamos”, cuenta Ricardo, uno de los tantos argentinos apasionados por las estadísticas de fútbol. De acuerdo a su visión de este tema, su máximo placer es “investigar la historia. Analizar datos obtenidos y cruzarlos hasta obtener algo que cierre con lo que busco, sea para afirmar la premisa o descartarla”.

Miembro del Centro para la Investigación y la Historia del Fútbol, cuando se le pregunta sobre cómo y cuándo se le ocurrió arrancar con esto, señala: “Creo que allá por el 2006 me vinculé al CIHF, algo que fue coincidente con mi toma de conciencia sobre el amateurismo y mi curiosidad en investigar el nacimiento de los deportes en Argentina. Encontré en el Centro un lugar especial en donde aportar descubrimientos y obtener a su vez esos datos que por un lado satisfacen necesidades y por otro hacen de disparador para nuevos descubrimientos”. Masse agrega que el tiempo que suele dedicarle a las estadísticas y demás actividades vinculadas a la historia “depende de varias cosas, pero en promedio estimo que son dos o tres horas diarias”.

Simpatizante de River Plate, recuerda los motivos que lo condujeron a inclinarse por la entidad de la Banda Roja: “Soy de River por toda mi familia, principalmente por mi viejo y mi abuelo. Mi abuelo era socio del padre de Alfredo Distéfano y según cuenta una historia familiar (no sé si fue tan así) él le regaló la primera pelota de fútbol a Alfredo. Tengo una foto de Alfredo con dedicatoria a mi abuelo. También mi abuelo era conocido de Antonio Vespucio Liberti”.

Hace algunos meses, Ricardo realizó un completísimo informe acerca de uno de los equipos porteños desaparecidos en los albores del amateurismo, más de un siglo atrás. Aquel team era “Retiro Athletic Club”, que actuaba como local en la zona portuaria, y, al igual que tantos competidores de la época en la que nació nuestro fútbol, estaba conformado por numerosos jugadores ingleses. “Me apasiona descubrir cosas que se desconocen”, indica cuando se lo consulta sobre las razones por las cuales emprendió semejante investigación: “Estando en un grupo de historiadores me pareció oportuno investigar a ese club del que casi nada se conocía y poder compartirlo. Fueron saliendo cosas y realmente fue un gustazo hacer la investigación que me llevó algunos años. Además, sin apartarme del rigor investigativo. He colaborado con algunos escritos para el CIHF. Siempre está la ilusión de poder difundir algún descubrimiento que ayude a otros investigadores e historiadores”.

Mase resume qué es lo más “loco” que hizo para tratar de encontrar material: “Desde horas de hemeroteca hasta el envío de mails a personas que no tenían idea de la actuación de algún antepasado suyo en un tema relacionado con mi investigación puntual. Muchos contactos con bibliotecas de instituciones oficiales con respuestas sorprendentes sin desperdicio alguno para mi búsqueda, y otras risueñas. Muchas anécdotas que llevarían gran espacio desarrollarlas”.

Hoy está jubilado “pero hago algún trabajo administrativo”, aclara. “Le dedico horas también a la genealogía y tengo otros hobbies que les dedico muy poco tiempo”, remata.

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