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ASÍ NACIÓ: la estación Villa Real del Ferrocarril San Martín (entonces se denominaba Buenos Aires al Pacífico) fue construida en 1809. Pero un año antes, el virrey Sobremonte estableció en esta zona su residencia de verano. Como las residencia de la mayoría de los virreyes que gobernaron el Río de la Plata se encontraba en esta fracción de tierra finalmente al barrio se le dio el nombre que lleva.
NO EXISTE MÁS. La mencionada estación (foto de portada) funcionó hasta 1938. Pero el edificio se mantuvo en pie hasta que en 1995 fue demolido. Se ingresaba por Irigoyen 2210 y el terreno, estaba delimitado por Varela, Bruselas, Irigoyen y Melincué: una cuadra por cuatro cuadras de longitud. La traza completa de este ramal denominado Sáenz Peña-Villa Luro, fue desmantelada. Se había construido en tiempos florecientes de los ferrocarriles, con el objetivo de unir dos ramales del BAP, y así conectar el Riachuelo con el oeste. En ese contexto, Villa Real se convirtió en una de las estaciones más importantes de esta nueva traza, ya qua casi todo el resto, eran apeaderos. El 16 de septiembre de 1909, pasó por allí el primer tren (los hubo de pasajeros y de cargas) y en torno al edificio, comenzó a levantarse el barrio luego de efectuarse el loteo de parcelas.
EN DECADENCIA. La actividad portuaria del Riachuelo mermó en los albores de la década del 30 y las autoridades del BAP -por entonces los ferrocarriles eran privados- decidieron dar de baja el servicio en 1938. Cuatro años después se desmantelaron las vías. La vieja estación quedó reducida a una manzana, por el posterior avance de las calles. En el interior de esta manzana, rodeado por un cerco, sobrevivió el edificio original, aunque los yuyos crecieron a su alrededor y el estado de abandono en que se había sumido, era total.
POCO QUEDÓ. En 1989 los vecinos derribaron el vallado, reclamado su restauración. Sin embargo, no tuvieron éxito, pues tras la demolición de 1995, lo que allí se construyó fue un complejo residencial. Lo único que permanece hasta nuestros días, es una sala de personal y una palmera, que fueron trasladadas hasta una plaza, la Villa Real, distante cien metros del sitio original. Pero tan representativa resultó, que el escudo oficial de Villa Real contiene un dibujo de una locomotora a vapor junto a la antigua estación.
BARRIO CHICO. Villa Real es el segundo barrio capitalino de menor superficie. El más pequeño es San Telmo. Además es uno de los menos poblados, detrás de su vecino Versalles y Puerto Madero. Según el censo de 2001, posee 14 mil habitantes.
CUESTIÓN DE LÍMITES. Las calles que lo limitan son Lope de Vega, Baigorria, Irigoyen, Nogoyá y la Avenida General Paz. En tanto limita con Villa Devoto (al norte), Versalles (al sur), Monte Castro (al este) y -General Paz mediante- con estas localidades de la provincia al oeste: Ciudadela, José Ingenieros y Villa Raffo. La mayor actividad comercial se desarrolla sobre las avenidas Beiró y Lope de Vega.
NO HAY DOS SIN TRES. El barrio poseía dos plazas: la que lleva el nombre del barrio está entre Irigoyen, Varela, Bruselas y Simbrón y cuenta con un Centro de Jubilados. Y la Juan B. Terán, de gran extensión (21.000 metros cuadrados) se halla entre Nogoyá, Gordillo, Melincué y Juan E. Martínez. Terán fue fundador y primer rector de la Universidad de Tucumán. Por otra parte, en Irigoyen 2255 funciona el Museo del Automóvil. Pero en 2015, se sumó una tercera, ya que el predio abandonado entre las calles Moliere, Cnel. Ramón Lista, Virgilio y Varela fue recuperado, creándose espacios verdes y áreas deportivas. Por votación del 70 por ciento de los vecinos, recibe el nombre de Las Toscaneras.
LOS CLUBES DE VILLA REAL
JORGE NEWBERY. Irigoyen 2050 (foto).
TRIGLAV. Manuel Porcel de Peralta 1458.
VILLA REAL. Tinogasta 5739.