TRES CLUBES PORTEÑOS, TRES ASOMBROSAS CITACIONES
En la Copa América de 1979, Menotti sorprendió al convocar a una mayoría de futbolistas que jamás habían vestido oficialmente la casaca de la Selección Nacional. La Argentina debutó el 18 de julio con Bolivia, en La Paz, alistando a un solo campeón del mundo: Passarella. En ese equipo también actuó Hugo Coscia, delantero de San Lorenzo, que jugaba así a nivel internacional por cuarta vez. Para José Luis Gaitán, de Rosario Central, fue su segundo encuentro. ¿El resto? Todos debutantes: Vidallé (arquero de Gimnasia La Plata); Carlos Ángel López y Roberto Díaz (Racing); Eduardo Saporiti (River); Miguel Ángel Bordón (Boca); José Antonio Castro y Pedro Larraquy (Vélez); Sergio Fortunato (Estudiantes); Jorge Gáspari (Quilmes); y José Van Tuyne (Rosario Central). ¿El resultado? 1 a 1, con gol de Carlos López a los 5’ del primer tiempo.
Para el próximo partido (2 de agosto), se produjo el debut de Maradona en la Copa y la convocatoria de Juan Barbas. Para el volante de Racing era su sexto partido internacional y para el crack de Argentinos, el úndécimo. Los demás, ya habían jugado con Bolivia en el estreno. Con gol de Coscia, la Selección, cayó 2 a 1 ante Brasil, en el Estadio Maracaná. Muy pronto, Diego y Barbas, también estarían presentes en Japón, cuando la Selección juvenil saldría campeona mundial. El máximo torneo juvenil se disputó entre el 25 de agosto y el 7 de septiembre.
En el tercer partido de esta Copa América (3-0 a Bolivia en Vélez) no hubo variantes a nivel convocatorias. Sí en el cuarto (2-2 con Brasil en River), donde las novedades fueron el concurso de Victorio Ocaño (segundo partido internacional para el defensor de Talleres de Córdoba), y los regresos de Gallego, Valencia y Bochini. El “diez” de Independiente acumulaba una larga ausencia con la casaca albiceleste: no jugaba desde mediados de 1977. Curiosamente, tras este encuentro ya no volvería a ser llamado por Menotti. Recién en 1984, Bilardo lo hizo retornar al plantel. En 1986, sería campeón mundial en México.
En relación al mencionado cotejo con Brasil por la Copa América, quedó en el recuerdo porque la Argentina fue conducida en forma interina por Federico Sacchi. La ausencia de Menotti se debió a que, precisamente, había viajado a Japón con los juveniles, a quienes también dirigía. El empate con los brasileños, marcó la eliminación de Selección de la Copa América. Con respecto a todos los debutantes argentinos que pasaron por este torneo, sólo uno, Van Tuyne, estaría en el Mundial de España ’82.
En 1980 algunas decisiones de Menotti relacionadas a convocatorias, generaron cierto estupor al tratarse de jugadores que ni siquiera habían debutado en las primeras divisiones de sus respectivos equipos. El primer caso fue el de Carlos Daniel Tapia, a quien llamó para enfrentar a Chile, en un amistoso que se disputó en septiembre, en Mendoza (empataron 2 a 2). Tapia había cumplido 18 años en agosto y en ese cotejo, reemplazó a Leopoldo Luque –también de River- a los 37’ del segundo tiempo. Recién en 1981, llegaría a la primera de su club.
En diciembre de 1980, para medirse amistosamente con la Unión Soviética en Mar del Plata (1-1), el DT convocó al delantero de Boca Jorge Cecchi (17 años), que recién debutaría en su institución en abril del año siguiente. Cecchi fue titular y jugó hasta los 28 del segundo tiempo (siendo relevado por Carlos Fren), junto a Maradona y muchos de los que en 1978 fueron campeones mundiales. Estuvo en un partido más, unos días más tarde, cuando en otro amistoso, la Argentina goleó a Suiza 5 a 0 en Córdoba. Aquí, el joven boquense entró en reemplazo de Luque a los 16’ del segundo tiempo.
En este cotejo frente a Suiza, se produjo el debut de Alejandro Débole (18 años recién cumplidos), que ingresó por Valencia a los 28’ del segundo tiempo. Delantero de Ferro, todavía era miembro de la tercera verdolaga cuando llegó su convocatoria. En este caso, nunca debutó en la primera de su club. Unos nueve meses después de aquella presentación, Débole hizo su estreno local actuando para Racing.
De los tres jóvenes mencionados, únicamente Tapia tendría futuro entre los mayores del seleccionado, aunque esperó nada menos que cinco años para ser convocado otra vez. Ya en la antesala de México ’86, y como integrante del plantel de Boca Júniors, Carlos Salvador Bilardo lo anotó en la lista mundialista. Luego de aquel debut en 1980, su segundo partido lo jugó en 1986. Fue un amistoso en Israel (7-2), en el cual ingresó por Giusti a los 15’ del segundo tiempo. Sobre la hora, convirtió el séptimo gol argentino y el que sería el único de Tapia con la casaca celeste y blanca.
